Un deseo.
Una esperanza.
Un poder.
Todo nace del árbol, son las raíces de mí ser
las que abrazan la materia que da origen a la vida.
Viento que
recorres mi cuerpo, te escucho, te observo, te sonrío.
Intento tomarlo con mis manos pero me detiene y me besa.
Su calor.
Su aura.
Su paz.
Su armonía.
Ella toma forma al
recorrer su mundo, navega formando círculos mostrando su ser como
la espuma al roer de la arena.
Lo que tus labios
son, el elixir de la vida, sibila del ayer.
Cada gesto,
Cada caricia.
Cada mundo que
invocas y dejas a la deriva en mi cuerpo
con cada palabra
que tomas como rosa de campo.
¿Si escribiera en
lo oscuro de un cielo tu nombre, con la sangre que nace de mis manos por la
sutil caricia de una rosa?, ¿Que sería tu respuesta?
No hay comentarios:
Publicar un comentario